Member of the European Directory of Soap and Cosmetics Makers

martes, 8 de junio de 2010

COCO (cocos nucifera)


Me encanta el coco, me recuerda a mi niñez... entre dulces y pastas de ese sabor, y su aroma siempre me trasporta a lugares exóticos y a días de playa de juventud, en los que el olor del copertone se extendía a varios metros de la persona que lo utilizaba (olía que alimentaba, decimos por aquí).

En la Feria de Abril de Sevilla, mi ciudad, es visita obligada para mí pararme en un puestecillo, de los que están junto a la calle del Infierno, y comprar un trozo de coco. La textura yel crujido al morderlo son un gustazo.

La esencia tanto para cosmética como para jabones me gusta más en invierno y utilizo en estos últimos también crema de coco y coco rallado (ligeramente exfoliante), a más, claro está, que el aceite de coco de un 20% a un 25% del total de las grasas.

El aceite de coco es un aceite vegetal saturado obtenido de la pulpa del coco seca, llamada copra. Es de bajo peso molecular lo que determina su buena solubilidad y su composición es alta en ácido laúrico, seguidos en menor proporción por el ácido mirístico, palmítico y oléico entre otros, por lo que es hidratante, tonificante, rejuvenecedor y delicado con las piles sensibles e irritadas.

Su uso en la elaboración del jabón produce gran espuma y le añade dureza, suavidad e hidratación siempre y cuando no se use una proporción excesiva lo que, paradojicamente, reseca la piel.

No hay comentarios:

Publicar un comentario