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viernes, 12 de noviembre de 2010

EXFOLIANTE JABONOSA DE MENTOL Y ARCILLAS PARA PIES. PASO A PASO


Por ahora, con este exfoliante para pies, doy por terminada la serie de  refundidos alternativos de estos días aunque se me ocurren otras versiones exfoliantes para pies, con barros del mar muerto,  barros Rasooul o arcilla verde y base de jabón verde, en ese caso.

Los pies los deja estupendos e hidratados y el mentol reconforta enormemente cuando están cansados y doloridos, aunque en un próxima versión probaré algún cambio, porque de la experiencia se aprende y no hay otra manera de llegar a lo que queremos que probando otras alternativas.

 Por un lado, la piedra pómez que tenía en polvo, para mi gusto, es demasiado fina. Si tenéis posibilidades de ponerla de un grano más gordo o arena de la playa o polvo de roca volcánica, pues mejor.Otra opción en una piedra pómez que machaqueis vosotros.
Por otro lado, mis cristales de  mentol de disolvían en alcohol y tengo que probar a hacerlos polvo e intentar disolverlos en agua, pues aunque eran sólo dos gramos de alcohol lo que le he puesto, al ser el alcohol un disolvente muy potente,  ha disuelto todo el azúcar moreno de caña que lleva (de ahí, en parte, el colorcito de marras...jejejejeje).

La he usado ya, recién hecha, y era una crema gorda espesa. Habrá que esperar unas horas a ver realmente cómo queda, puesto que la manteca de karité que lleva se solidificará y posiblemente cambie toda la textura que ahora tiene incluido su "rasca rasca" porque a mí me gustan los exfoliantes para pies que rasquen bastante.

Yo creo que he tenido errores, además, en el orden de poner los ingredientes. Eso te das cuenta cuando ya no tiene vuelta atrás, pero pondré el paso a paso tal cual, porque me parece interesante que se vea que tendría que haber puesto el azúcar lo último y hubiera resuelto mejor el tema.
De todas formas, me gusta cómo ha quedado, aunque vais a tener que fregar el bidé después de la exfoliación de pies jajajaja, pero merece la pena porque se trata de un masaje que favorece la circulación, de una exfoliación, de un descanso para los pies, de una limpieza y una hidratación: un 5 x 1, que termina con dejar los pies en agua calentita, un rato, en la que se derretiran la karité y las sales del mar muerto. Finalizar enjuagando bien  los pies con agua fría. Secaos con papel de cocina o tendreis que echar a lavar la toalla por las arcillas.

Os propongo esta versión, pero podéis hacer la que gustéis partiendo de la base de jabón que ya tenemos. Si no queréis tal guarreo de color, usad azúcar blanca en terrones y lo machacais un poco y le podéis poner entonces arcilla verde que queda más acorde con el mentol y el  a.e de menta piperita que lleva.
 Otra posibilidad, es  hacer un poco de base de jabón con colorante verde, luego le ponéis azúcar blanca y caolín y os queda verde y con una arcilla más suave. Yo, obviamente, he aprovechado la base de jabón rosa que tenía hecha.

Empecemos con el paso a paso:

Como me han preguntado cómo tiene que quedar la base de jabón, os pongo una foto de cómo sale de la garrafa. A las 24 horas no es una crema ligera, es esto:

1.- 100 gr.de base de jabón (ver entrada mousse de rosas jabonosa exfoliante)



2.- Remover  a mano con varillas y agregar 30 gr. de manteca de karité derretida.


3.- Remover hasta integrar y añadir 4 cucharadas de piedra pómez en polvo, o mejor arena de la playa o polvo de roca volcánica (menos cantidad)



4.-Agregar seis cucharadas de azúcar moreno de caña. Esto, ahora, lo pospondría hasta el final y no se hubiera desecho casi.


5.- Añadir dos cucharadas de sales del Mar Muerto o del Himalaya. Yo también la pondría al final ahora, pero no se ha diluído.




La fórmula, entonces, se espesa considerablemente.



6.- Añadir 3 gr. de mentol cristales disueltos en 2 gr. de alcohol. Hay que probar machacarlos e intentar disolverlos en un poco de agua, porque ya veis que el azúcar moreno de caña comienza a derretirse con esa poquísima cantidad de alcohol.


8.- Agregar dos cucharadas de arcilla rosa. Yo ahora, visto lo visto, le hubiera puesto sólo caolín.



8.- Añadir dos cucharadas de arcilla blanca o caolín



9.- Remover hasta integrar




10.- Añadir un puñado de semillas de amapola


11.- Añadir el a.e. de menta piperita.

 Ahora es cuando le ponía yo el azúcar y la sal. Siempre se ha podido echar antes más arcilla, de forma que se vea una textura en la que no se vaya a disolver el azúcar. Otra posibilidad es hacer la exfoliante y cuando se vaya a usar poner entonces el azúcar.

12.- Remover y envasar.


Como siempre digo, todo es manifiestamente mejorable. Sólo hay que hacer las pruebas para ello o los cambios que querais, según las materias que tengais o le querais poner. A mí el color no me convence: ya estoy deseando hacerla en verde.
Espero que la idea  os sea útil!!