Este color naranja tan bonito tiene truco, ya os lo contaré en una próxima entrada de un Jabón de Argán, si es que no le averiguais antes. Al natural es más intenso el color de lo que se refleja en las fotos y no lleva ni aceite infusionado de zanahoria, ni es producto del colorante que aunque poco, algo lleva. Estoy muy contenta con el resultado porque mi colorante naranja, con el tiempo, se aclaraba algo y perdía vida y el penúltimo que usé, terminó siendo marrón (véase el chasco en la anterior entrada) y he encontrado una solución para no poner colorante alguno y que salga un jabón natural de un naranja fuerte precioso (Sonia, si piensas que lleva Buriti tampoco es Aceite de Buriti, que ambas lo usamos, y también da un color anaranjado, aunque por los precios sólo lo uso en cosmética). Ayuda, además, el aceite esencial de naranja, claro está.
Tendré que probarlo añadiendo, además, algo de aceite de zanahoria en la traza y voy a tener el jabón más naranja del verano.
Tendré que probarlo añadiendo, además, algo de aceite de zanahoria en la traza y voy a tener el jabón más naranja del verano.
El contraste de colores con el negro me encanta y éste es un óxido americano que no destiñe, regalo de Yokasta.
Huele estupendamente a Bergamota, Naranja y Petitgrain, a partes iguales, y le he añadido unos gramos de Tintura de Benjuí para fijar bien el aroma.
Con un sobreengrasado del 11% de Karité y Germen de Trigo, los demás aceites son de oliva, coco, palma y almendras dulces.
La concentración es del 35 %.
Os dejo con la intriga. Buen fin de semana a todos.