Llevan hechos más de una semana, pero no los he subido antes porque estaba disgustada y ya se me ha pasado: Se me borraron todas las fórmulas que tenía en la calculadora de saponificación y estos dos jabones ni los había exportado de la misma aún, ni los tenía escritos a mano tampoco, lo que quiere decir que, para lo bueno y para lo malo van a ser únicos.
¿Y ahora qué pongo yo en las etiquetas? jajajajaja.
Del de Aloe Vera, recuerdo que le puse más de 100 gr. de Aloe en la traza y seda natural en la sosa. Lo aromaticé con fragancia de manzana y la verdad, como suele pasar con todas las fragancias, costó lo suyo echarlo al molde.
En el de Rosa, utilicé, en vez de agua destilada, agua de Rosas que hizo Sira y que me regaló cuando estuve en León. La fragancia es de rosas y lo mismo: echarlo al molde un numerito...jajajjaja.
En la fotografía del de Aloe, sobre uno de los jabones, juguetea uno de mis muñecos de Terracota, español, de los años 20 a 40 del siglo pasado.
Como no se puede hablar mucho de estos jabones, hablaremos algo de muñecos:
Los de Terracota eran los que tenían las niñas españolas menos pudientes, porque las que lo eran, disfrutaban de muñecos de biscuit o bisqué alemanes y franceses de una calidad y de una belleza increíbles.
Pues a mí me gustan todos, pero sólo colecciono bebés y niños pequeños y he pensado, en adelante, fotografiarlos con algunos jabones y así los vais viendo, que son preciosos.
Entre mis favoritos están un nene de terracota de la casa Famil, de fabricación Argentina que me tiene enamorada y será el próximo que os enseñe, ya tras agosto. Nuestras foreras de Mendrulandia argentinas seguro que saben de la casa que hablo. Era muy famosa en la fabricación de muñecos, no sé si actualmente sigue existiendo o ya está desaparecida.
Algunos provienen de compras en tiendas de juguetes antiguas o del rastro madrileño. Los de procedencia alemana y francesa, sobre todo de subastas de ebay (inglesas y estadounidenses, la mayoría) y el resto de todocolección, donde suelo encuentrar los de terracota.
Los tuve de pequeña, que provenían de la familia de mi madre, pero misteriosamente desaparecieron y ahora de mayor, me estoy haciendo mi colección.
Seguro que os gustan y así conocéis algo más de mí.